Los termómetros infrarrojos de frente son una forma cómoda y no invasiva de medir la temperatura corporal, pero su precisión puede ser tema de debate.
Los termómetros infrarrojos de frente funcionan midiendo la energía infrarroja emitida por la arteria temporal en la frente.
La precisión de estos dispositivos puede verse influenciada por varios factores:
Técnica del usuario:El uso incorrecto, como sostener el termómetro a la distancia incorrecta, puede afectar significativamente la lectura.
Factores ambientales:Factores externos como la luz solar directa, corrientes de aire, una habitación fría o fuentes de calor radiante pueden afectar la medición.
Factores físicos:La sudoración, la suciedad o el uso de sombreros en la frente pueden interferir con la lectura.
Calibración y emisividad:La calibración interna del dispositivo y su capacidad para tener en cuenta correctamente la emisividad de la piel (una medida de qué tan bien una superficie emite energía infrarroja) son cruciales.
Los profesionales médicos a menudo consideran que la temperatura rectal es el "estándar de oro" para la precisión, especialmente en bebés y niños pequeños.
Termómetros rectales:Una temperatura rectal se considera la medida más confiable y precisa de la temperatura corporal central.
Termómetros orales y de oído:Los termómetros orales y de oído (timpánicos) también se consideran generalmente más precisos que los termómetros de frente.
A pesar de la posibilidad de imprecisiones menores, los termómetros infrarrojos de frente son ampliamente utilizados y tienen varios beneficios:
Detección:Son excelentes para la detección rápida y sin contacto de fiebre en lugares públicos, escuelas o en el consultorio de un médico.
Comodidad:Son fáciles de usar en un niño dormido o inquieto, lo que los convierte en una opción popular para los padres.
No invasivos:La falta de contacto físico reduce el riesgo de propagación de gérmenes.
Si bien un termómetro de frente puede no proporcionar la temperatura corporal central precisa que proporciona un termómetro rectal, es una herramienta muy útil para la detección de fiebre.
Si obtiene una lectura que indica fiebre, especialmente en un bebé o niño pequeño, a menudo se recomienda confirmarla con un método más preciso (como un termómetro rectal) para garantizar un diagnóstico preciso y guiar la acción médica adecuada.
Siempre siga cuidadosamente las instrucciones del fabricante para obtener la lectura más precisa posible de su dispositivo.